A lo largo del tiempo a los poetas se les ha preguntado ¿que es poesía?, todos tienen una visión diferente para mí la poesía, no es más que el centro del universo, es un gran hoyo negro, el cual no se define con exactitud; yo decido escribir poesía porque me alimenta el alma, y no necesariamente debe ser cursi o amorosa el chiste de escribirla es sacarle jugo a tus sentimientos y pensamientos, no necesariamente tienen que rimar, no necesariamente los lectores tienen que entender lo que tu escribiste, no, al contrario el poeta lo llevamos todos dentro.
Escribir lo que sea todos escribimos en la mente, con las palabras, en papel; que importa si son cartas o cuentos, poemas, novelas, escribir alimenta el espíritu de todo ser humano, debemos rescatar esa idea y nun dejar de hacerlo, ya que escribir es vivir.

Todos sabemos que la realidad supera a la ficción sea cual sea ésta, por lo tanto las novelas, los cuentos, e incluso los ensayos, no me parecen más que una forma estética, acaso una historia, que pretende expresar una idea, un momento, una vida, incluso un deseo. Todo bien, yo mismo he sido partícipe de esa desfachatez: crear para llamar la atención del ingenuo lector (¿Quién más ingenuo? ¿El lector o el creador?) En fin, creo que comienzo a desviarme del tema. La realidad, todos sabemos, ha sido, es y será, una influencia inagotable para crear (Bukowski, Fante, Easton Ellis lo supieron o lo saben) ¿Pero qué pasaría si alguien se atreviera a plasmar en un libro toda aquella realidad que ha traspasado las puertas de sí misma, es decir, superar su propia crudeza, la misma destrucción? Pues Adam Parfrey lo hizo a finales de los ochenta.

La cultura del Apocalipsis es un libro, se podría decir, contracultural. No en la forma que entendemos comúnmente (ejemplo: los poetas beat y su irreverencia en la poesía, o el movimiento punk) si no como algo más sincero, una forma de vida que, en efecto, se opone a la cultura, a la política, a la moral, impuestas o no, no se trata de un libro que habla de rebeldía, si no de una forma de vida destructiva, escabrosa, e incluso autodestructiva, una forma de seguir por caminos, equivocados o no, únicos.

A penas abrimos el grueso tomo de La Cultura del Apocalipsis y nos encontramos con un ensayo sobre la licantropía moderna. ¿Licantropía? Suena como a película hollywoodense, cierto, pero en algún lugar se tenía que hablar acerca de esa gente que se crió entre lobos y aprendió conductas animales (sí, algo así como Tarzán), fotografías de distintos autores que muestran a una pre adolescente en una postura que a cualquiera nos parecería sumamente incómoda, casi como si fuera... un lobo. ¿No están asustados? Terminando el artículo, nos encontramos una entrevista a una tal Karen Greenlee ¿Les suena? A mí tampoco me sonaba pero su nombre (qué lindo nombre, la verdad sea dicha) se me quedó grabado en cuanto terminé de leer la entrevista. Más allá del morbo y la fascinación por la muerte, esta mujer nos explica, con detalles, cómo se lleva una vida consagrada a la necrofilia (sí, follar con muertos), y nos muestra notas periodísticas, e incluso un dibujo hecho por Karen que muestran a una mujer en brazos de un esqueleto envuelto en una capucha, sí, La Muerte. Suena como algo que sólo un desquiciado querría leer, pero, sea cierto o no, uno termina aprendiendo cosas nuevas, por ejemplo, que mientras te montas en un muerto para follártelo, momentos más tarde comenzará a expulsar sangre por la boca. Cultura general... nunca sabes cuándo tu sobrino, tu novio, tu hermano o tu amigo te preguntará si sabes cómo hacer para coger con un cadáver.

Páginas como ésas y otras aun más escalofriantes se pueden encontrar en este libro, como tratados anarco primitivistas que se oponen al arte (sí, no es un texto sarcástico ni satírico, es un texto en contra de todo el arte) o en contra de la ciencia. Textos que proponen que existe un genocidio oculto contra el pueblo africano, o teorías de la conspiración que pretenden hacernos darnos cuenta de que el gobierno norteamericano pretende manipular las inocentes mentes de los menores. En fin, no es una novela de Coelho que puedas leer por la noche antes de dormir, ni un libro que le puedas regalar a tu madre el diez de mayo. Es un libro sumamente desquiciado, un tratado sobre una cultura apocalíptica (¿El Apocalipsis ya ocurrió, y ahora sólo quedan las ruinas? Es, justamente, lo que propone este libro) que se vive lo mismo en Japón que en las cloacas de la Ciudad de México. El mundo se ha terminado, sólo esperemos, pacientemente, sin miedo y, si se puede, con hedonismo, el fin de todo esto entre psicóticos, necrófilos, asesinos seriales, ocultistas o artistas de performance que se crucifican en un Volkswagen.

Se preguntarán de que rayos trata esto de "Revolución Intelectual", bueno pues fue una simple idea que me surgió no le da nada, si no como uniendo mis ideas políticas en un viajesote, ciertamente la concreté, por así decirlo, mientras me fumaba un buen churro de marihuana y mis ideas volaban como moscas alrededor de un pescado frito, es ahí donde pensé bueno pq sí en 1810 y en 1910 hubo revueltas, revoluciones ,lucha por injusticias , pq no ahora que de igual manera hay injusticias , nadamás que ahora considero yo a un nivel más patético, con desigualdades que de verdad a uno no le queda de otra más que aceptarlo aunque sean inaceptables, com0 por ejemplo que el hombre más rico del mundo sea un mexicano y que por el contrario México a pesar de estar en voga y en boca de los países más importantes es aún un país en vías de desarrollo,en un país donde Cristina Pacheco le pregunta a unos niños que trabajan en la feria - oye niño y qué comes? como frijoles, ajá y qué más? nadamás.
la Revolución Intelectual tiene como objetivo a largo plazo perfeccionar el sistema político mexicano y a su vez el de todos los países que se encuentren en condiciones similares, pretendo que esto tenga efecto primero utilizando el internet como medio masivo, explorable y explotable, tenemos que aprovechar de éste medio para hacer saber de la revolución. para llevar a cabo el proyecto hay que juntar a banda interesada en un cambio , en una transformación, en algo más allá que una simple lucha como las demás; necesitamos llegar al subconciente, a los cerebros en crecimiento, necesitamos impulsar en primera instancia a nuestra generación a todos los jóvenes que dento de 20 o 30 años serán quienes lideren y sean la fuerza de tranajo en el país, hasta llegar a los puntos generacionales. talvez todo esto les paresca una UTOPÍA, pero las grandes filosofías hoy llevadas a cabo empezaron así, como una utopía sin que nadie creyera más que el portador. Ahora estoy segura de que a muchos otros mexicanos ya se le ha ocurrido alguna idea semejante para el 2010, bueno pues los invito a que unamos ideas y aportemos de nuestras opiniones serias para formar talvez un frente o talvez una secta o no sé talvez un pinchurriento grupillo, pero que más adelante nos podamos consolidar.
El espíritu de mi propuesta es reformar el pensamiento como en su momemnto lo hicieron los pensadores de la Francia Ilustrada o los intelectuales de clase media mexicana en el s. XX como los hermanos Flores Magón por mencionar a algunos.
Es necesario que quien deseé apoyar a la causa tenga una mente bien abierta tanto como tus piernas al echarte a tu vieja o a tu wey, es encesario que tu mente al igual de abierta tenga una actitud futurista y modernista, es necesario que dejes de creer en muchas de las cosas que crees y en las que creen la mayoría, desde religión hasta concepciones comunes y populares del comportamiento humano. éste texto tiene como función la de convocar a la banda que quiera un cabio trascendental y verdadero en el manejo de éste mi amado país.
para cualquier acalración, comentario etc te invito a platicar de manera moderada y modesta sin subestimar el poder que un grupo de chavos poniendose de acuerdo pueden lograr.
no es necesario que tengas los sumos conocimientos para poder dar una opinion clara y objetiva, como por ejemplo yo pienso que el catolicismo es un factor que no deja que el país se modernice tanto economicamente como mentalemnte.
saludos de Mariajosé Rendón

"Los filósofos rara vez se convencen unos a los otros, si es que eso ocurre alguna vez, de modo que una discusión entre dos filósofos se asemeja a un diálogo entre sordos".

Con esta frase trato de analizar a la filosofía desde un plano que se expande por todos lugares y da como resultado una propuesta carente de todo soporte para llegar a una conclusión fidedigna; a esta situación le adjunto el hecho que hasta ahora lo poco que he estudiado sobre la filosofía no da muchas respuestas a lo que muchos tratan de conseguir. Es verdad que como estudio y conocimiento, la filosofía desentraña aquellas cuestiones relacionadas con la vida, el ser, la realidad y todo conocimiento que haya sido adquirido y por el cual se tenga una verdad subjetiva, porque si de algo he aprendido, es que no hay verdad absoluta, por más que se den las mejores conclusiones y la más correcta idea, ya que conforme se adquieren nuevos conocimientos, se van dando nuevas propuestas cada vez más complejas y cada vez más precisas, pero nunca llegando a la verdad absoluta.
Dentro de esta "ironía" del conocimiento, nos damos cuenta del profundo significado que tiene nuestra propia interpretación sobre las ideas y los hechos que tomamos para dar nosotros mismos nuestras conclusiones, las cuales tratamos de defender a como de lugar, y basandonos en pruebas que casi siempre son subsecuentes a nuestra propia realidad..
Es por eso que en este momento estoy perplejo ante la concepción que tengo sobre lo que conozco, ya que al no ser una verdad absoluta, no puedo refutar que lo que sé es cierto, y la tomo como verdadera por mi propia interpretación, pero ya sea real o ficticia, solo será una opinión más dentro del laberinto del conocimiento del cual muy pocos dan con la salida.